“LA ALEGRÍA DE LEER”
Por: Carlos Alberto Palau B.*
Colombia quedó en el último lugar en la evaluación internacional en “Comprensión y lectura de textos digitales”. Pero la noticia publicada en la revista Semana, del 30 de junio de 2011 bajo el título “Estudiantes colombianos no leen bien en Internet”, pasó casi desapercibida.
La Subdirectora de Análisis y Divulgación del ICFES, Isabel Fernández, afirmó al respecto: “Lo que dicen estas pruebas es que es necesario que los colegios den la orientación y enseñen estas competencias”. Es bueno aclarar que la evaluación la realizó PISA (Evaluación Internacional de Alumnos) a estudiantes de 15 años.
El país pierde competitividad al seguir dejándose sacar ventaja en lectura digital. Pues muchos países ya tienen experiencias en lectura en computador. En España, en la provincia de Extremadura, en los jardines infantiles están enseñando a leer directamente en los monitores, con el método Doman.
La avalancha de lectura digital que se nos viene encima a estudiantes y educadores, va unida a la tendencia mundial “Cero Papel”, que apunta a su consumo ecológico. Pero requiere del abaratamiento de dispositivos de la era post-PC, como las Tablet que afortunadamente, en diciembre del año pasado, salieron en la India a $35 dólares.
Lectura y bienestar económico
Para nadie es un secreto lo que dice en el informe de PISA: “La comprensión lectora predice el bienestar económico y social de las personas”. Con seguridad apoyándose en esta razón, en el “Encuentro Internacional de Formación de Lectores en la Primera Infancia”, el 20 de marzo pasado, la Ministra de Educación dijo que es necesario incluir el “Plan Nacional de Lectura y Escritura”, en los Planes de Desarrollo Municipales. El objetivo para el 2014 es aumentar de 1.6 libros al año, que leemos los colombianos, a 3.2 Aunque es necesario tener en cuenta que los alemanes y los noruegos leen un promedio de 17 libros por año.
No tenemos datos de libros leídos al año en Cartago. Pero si sabemos que la educación de la ciudad, tiene la obligación histórica de ubicarse nuevamente a la vanguardia en lectura, ya que tuvimos el liderazgo en el país. “En 1930, Evangelista Quintana escribió el primer volumen de “La Alegría de leer”, una cartilla de lectura y escritura para el primer año escolar. Fue, antes de las obras de García Márquez, el libro colombiano más vendido: sus tomos superaron probablemente el millón de ejemplares.” Afirma el historiador Jorge Orlando Melo, exdirector de la biblioteca Luis Ángel Arango, en la revista Credencial Historia, de febrero de 1999.
Es preciso recordar que Evangelista Quintana Rentería, nació en Cartago en 1896 y murió en Bogotá en 1979. Vivió en la Casa del Virrey y allí todavía se encuentra exhibido su comedor, con las sillas vacías esperando con ansiedad a los educadores(as) de la ciudad que, con sus proyectos innovadores en lectura digital, van a ocuparlas.
*Rector Liceo Cartago