Efecto Pigmalión en el aula
En el “Documento
11”: “Fundamentaciones y Orientaciones para la Implementación del
Decreto 1290” ,
del Ministerio de Educación, la palabra
“éxito” aparece escrita más de veinte veces.
La primera de ellas se encuentra en una frase
que sirve de cimiento conceptual, a la
estructura del Decreto: “La meta fundamental que debe regir a todo maestro o
maestra, institución o sistema educativo, es la de procurar de manera absoluta
que todos sus estudiantes alcancen de manera exitosa los fines propuestos o establecidos
dentro de un determinado proceso y período educativo” p.20
Otra de las
frases donde se lee la palabra éxito y que ilumina el nuevo paradigma educativo
dice: “la información que arroja la evaluación es fundamental para los
maestros, debido a que con ella se detectan las partes del proceso que están
fallando o que impiden a los estudiantes alcanzar las metas propuestas y
esperadas en sus desempeños de manera exitosa”. p. 26 y 27
Pero la palabra
éxito también se utiliza para mostrar otros puntos de vista: “las condiciones
del ambiente familiar, escolar, comunitario y social son muchas veces
definitivas para desempeños no exitosos. p.53
En el libro
también dice respecto a los estudiantes “todo derecho conlleva una
responsabilidad; razón por la cual se hace imperativo que el educando para
culminar de manera exitosa su proceso formativo, debe cumplir con todos los
compromisos institucionales” p.62
Por último, es
muy importante reflexionar sobre la frase: “los docentes del país deben ser
conscientes que sus acciones formativas están directamente vinculadas con el
éxito que logran sus estudiantes” (p.65) La frase recuerda el “Efecto
Pigmalión”, (profecías autocumplidas) que estudiaron, en el aula de clase, en
1968, los investigadores Lenore Jacobson
y Robert Rosenthal, de la
Universidad de Harvard.
Encontraron que el Efecto Pigmalión es
positivo o negativo, de acuerdo a
la creencia, de éxito o fracaso, que tenga el profesor acerca del alumno.
Por: Carlos Alberto Palau
Botero
Rector Liceo Cartago
Luna llena, abril de 2013